Educación Ambiental

Tú colaboración es esencial, ayuda al medio ambiente

Cada ciudadano genera de media al año unos 500 kg. de residuos, lo que ocasiona un importante problema ambiental. Es por ello que una premisa de la política ambiental de la comunidad europea en materia de residuos es la reutilización, como base para reducir la generación de residuos: aquel residuo que no se genera no produce impacto.

Recuperación y reciclaje

Otro pilar básico de la política ambiental en materia de residuos es la recuperación y el reciclaje de los residuos. Existe toda una infraestructura pública de instalaciones de recuperación de residuos, como primer paso para el posterior reciclaje. Estas instalaciones recuperan y separando los residuos en función de los materiales constituyentes, para luego remitirlos a gestores intermedios o a recicladores finales.

La eficacia de estas instalaciones de recuperación depende de la buena o mala gestión que el ciudadano hace de los contenedores de basuras del viario. Así, si el contenido de los residuos en el contenedor es el correcto, las cantidades recuperadas en estas instalaciones se maximizan, y con ello las recicladas. Es por tanto clave la colaboración ciudadana en la separación en origen de los residuos y el uso de los contenedores.

Un contenedor para cada residuo

Actualmente en el municipio existen por un lado cinco contenedores para residuos, identificados cada uno con un color concreto: amarillo, verde, azul, marrón y gris. Cada color está destinado a una fracción concreta de residuos. Estos cinco contenedores se completan con la presencia de otros dos tipos de contenedores de específicos, uno para la entrega de aceites usados de cocina, y otro para ropa y calzado.

Cuando se depositan residuos en un contenedor que no corresponde, se dificulta la recuperación. Los residuos que no se recuperan no se puede reciclar, e irremediablemente terminan en el vertedero.